El rendimiento del equipo, los problemas que envuelven al plantel, las actitudes del cuerpo técnico y los altos precios de las entradas conspiraron contra la presencia de los hinchas futboleros de la Selección.
Pese a la importancia de la instancia en la que se encuentra el equipo de Diego Maradona, el público se muestra entre cauto y preocupado, y aunque se espera una mayor afluencia sobre el inicio del encuentro, hasta el momento la calma reina en derredores del estadio de River Plate.
El estado del campo de juego es impecable, con una superficie por demás pareja, tribunas pintadas a nuevo y los accesos despejados para el públicos, los seleccionados y para las personas que se encargarán de la transmisión.
De a poco comienzan a verse niños camuflados de celeste y blanco llevados por padres que rezan por una buena actuación del equipo nacional para evitar, a la vez, la posibilidad de que los pequeños guarden en su retina el recuerdo de un seleccionado potencialmente poderoso, pero continuamente autodestructivo. La llegada de los planteles al estadio.
El seleccionado peruano fue el primero en llegar al Monumental, a las 17:22, luego de salir del hotel céntrico donde se alojó, a las 17:01.
La Argentina, por su parte, llegó al estadio un minuto después, a las 17:23, luego de partir desde el predio de Ezeiza a las 16:42.
Carlos Bilardo fue el primer integrante de la delegación nacional en pisar el anillo interno del Monumental, en tanto que Carlos Tevez -quien hoy iniciará como suplente- fue el primero de los jugadores en entrar. Luego del "Apache" ingresó Diego Maradona, mientras que Martín Demichelis fue el último de la fila nacional.
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