Para los mexicanos, el vencer a Estados Unidos en su casa es algo que ya pasó de un deseo a una obsesión casi enfermiza.
En la televisión local, los espacios deportivos dedican gran parte de su espacio a hablar del duelo y tienen enviados en Columbus, Ohio, desde hace dos semanas.
El tono de la discusión es el mismo. Todos quieren una victoria que rompa una racha que ya alcanza casi los 10 años desde que México ganó en Estados Unidos en marzo de 1999, cuando el Tri se impuso 2-1.
"Vamos a demostrar en la cancha que somos mejores, con mucho trabajo, con mucha humildad vamos a hacer mejor las cosas, el frío va a ser para los dos y la hegemonía de Estados Unidos tiene que acabarse, hay que respaldar a (Sven Goran) Eriksson con un buen resultado y haciendo un buen partido", aseguró el delantero mexicano Carlos Ochoa.
En estos días, Eriksson requiere todo el apoyo posible y si pierde el miércoles en Columbus, lo requerirá aún más.
El entrenador sueco ha sido duramente criticado por clasificar a México hasta el último día de la fase semifinal de las eliminatorias, en la que sufrió derrotas ante Jamaica, Canadá y Honduras.
"Perdimos esos juegos, la crítica es merecida", dijo Eriksson en su más reciente rueda de prensa. "Estados Unidos mejoró durante los últimos años...se ha clasificado al mundial casi siempre en los últimos años, pero nosotros no tenemos que sentirnos inferiores, todos dicen que es difícil, la estadística dice que es difícil, pero tenemos que cambiar esto, el próximo miércoles tenemos la oportunidad de hacerlo".
Una derrota ante el odiado rival sería un escollo muy difícil de sortear para Eriksson. La presión de la prensa, aficionados e incluso patrocinadores alcanzaría los mismos niveles que llevaron al cese de Hugo Sánchez, predecesor del sueco en el cargo. Sánchez quedó fuera del seleccionado al fracasar en su intento por clasificar a los pasados Juegos Olímpicos.
En México, no son pocos los que quisieran ver caer a Eriksson para ofrecerle el cargo a Javier Aguirre, quien hace poco terminó su relación con el Atlético de Madrid.
Previo al Mundial del 2002, el "Vasco" llegó al cargo de entrenador del Tri en la fase final de la eliminatoria y milagrosamente clasificó a México, cuando parecía que el equipo se quedaría fuera de un mundial.
"Javier es un gran entrenador y lo ha demostrado, pero quiere seguir dirigiendo en Europa, el entrenador es Sven y vamos a defenderlo a muerte en la cancha. Todos estamos muy conscientes de eso y vamos a hacer buen fútbol para defenderlo dentro de la cancha", aseguró Ochoa, quien fue uno de los consentidos de Aguirre con la selección e incluso en el Osasuna español.
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